QUÉ TAN IMPORTANTES SON
Si bien, solo un porcentaje reducido de usuarios conoce la función de la terminal cilíndrica de una clavija común de una computadora, lo cierto es que el desconocimiento sobre la ingeniería de acoplamiento a tierra no está limitado únicamente al público en general. Por el contrario, este se extiende al ramo eléctrico y electrónico, provocando que cierto personal técnico no relacione errores de fallos y desperfectos en sus equipos – validando visual y mecánicamente que una conexión a tierra existe, sin considerar por un momento la bi-direccionalidad de la conducción de la energía a través de esta conexión.
El desarrollo e innovación de la electrónica – con sus enormes beneficios en productividad, comunicación y comodidad – hoy en día nos exige estrictos requisitos de operación que es muy difícil conseguir mediante un sistema de acoplamiento a tierra tradicional.
En efecto, la puesta a tierra de referencia electrónica – también llamada “0 lógico” – debe, en teoría, operar sin conflictos con el sistema pararrayos, así como con el sistema de acoplamiento a tierra de potencia eléctrica. Qué sucede en la realidad ? Los sistemas pararrayos y de potencia eléctrica conducen a través de sí magnitudes catastróficas de energía para los vulnerables sistemas electrónicos – y debido a que los anteriores no son en verdad equipotenciales, terminan contaminando así a estos últimos, produciéndoles daños que en algunos casos serán irreparables.
Faragauss fue pionero – hace un cuarto de siglo – en el desarrollo de la tecnología de acoplamiento a tierra más avanzado que existe. Opera bajo un paradigma electromagnético – siendo una tecnología 100% mexicana, ya reconocida a nivel internacional – actuando como aspiradora de toda corriente de falla, o energía dañina para su sistema.
Adicionalmente, su exclusiva tecnología modular permite instalar estos sistemas de manera más sencilla, económica y segura que sus contrapartes tradicionales – mismas que operan bajo el paradigma de varilla copperweld o arreglo de malla subterráneo.
Ha medido recientemente la resistividad de su conexión a tierra ? Si detecta valores por encima 20 Ohms, su sistema no está trabajando adecuadamente. Si percibe además sulfatación o corrosión en terminales de cobre, esto implicará mayores complicaciones y gastos a la hora de efectuar el mantenimiento de su sistema tradicional – situaciones que no se presentan trabajando bajo el paradigma electromagnético de Faragauss.
Permítanos asesorarle – y comprobar mediante lecturas – la extraordinaria seguridad y eficiencia de este innovador sistema. Su personal y maquinaria estarán más que agradecidos, y nuestro equipo de expertos en Power Quality, gustoso de poder servirle.